El dirigente político peruano Yehude Simon, que militó en la izquierda revolucionaria latinoamericana de los años ochenta, no duda en advertir que el socialismo y el capitalismo están ajenos a la modernidad y al mundo globalizado.
Quien hoy preside el Partido Humanista Peruano, sostiene que el socialismo real convierte el colectivismo en la dictadura de la masa y suprime al individuo, mientras que el capitalismo practica "una especie de ateismo económico que excluye a las personas". Simon prefiere extraer lo mejor de ambos modelos e impulsar el humanismo como paradigma político e ideológico porque propicia la libertad individual, promueve el desarrollo social y practica la pluralidad.
El ex gobernador de la región de Lambayeque, Perú (2002-2008), ganó reconocimiento por desarrollar una gestión basada en la transparencia de la administración pública y no duda en afirmar que la corrupción tiene su caldo de cultivo en el modelo estatista. "Lo más perjudicial para la democracia es el estatismo porque quienes manejan el Estado se vuelven los nuevos monarcas".
Admite que su país está plagado de corrupción, pero su paso por el Parlamento le permite señalar que ese flagelo "no tiene que ver con ser de izquierda o de derecha, sino con la concepción del poder".
Libertad y autonomía. Yehude Simon también fue un perseguido político del fujimorismo y en 1992 fue condenado a prisión, donde permaneció ocho años y salió luego de recibir un indulto presidencial en 2000.
Desde esa experiencia invita al presidente Hugo Chávez a reflexionar, pues cree en la necesidad de "respetar al adversario, por muy duro que sea; de lo contrario, se implanta la dictadura. Si hay persecución, eliminación de instituciones y acoso a los partidos, el Presidente no va a trascender a la historia".
No quedó por fuera de las palabras de Simon el asunto de la libertad de expresión. El dirigente político, que ha pasado por todos los niveles de gobierno en su país, cree que cuando la prensa juega en función de los intereses de los dueños hay que combatirla con ideas, pero no cerrarla: "El país que pierde su libertad de expresión y de prensa cae en manos de la noche más oscura".
Ve con preocupación que funcionarios del Estado venezolano, como los magistrados y el contralor general, expresen en público y sin rodeo su simpatía con el Presidente de la república.
Considera que cuando los poderes se pliegan a un individuo "el gobierno deja de responder al pueblo para responderle a una minoría que administra todo en función de los antojos de una persona". Alerta que si el Ejecutivo absorbe al Poder Judicial se desata la corrupción, la democracia entra en riesgo y la sombra de la dictadura se cierne sobre el país.
Quien hoy preside el Partido Humanista Peruano, sostiene que el socialismo real convierte el colectivismo en la dictadura de la masa y suprime al individuo, mientras que el capitalismo practica "una especie de ateismo económico que excluye a las personas". Simon prefiere extraer lo mejor de ambos modelos e impulsar el humanismo como paradigma político e ideológico porque propicia la libertad individual, promueve el desarrollo social y practica la pluralidad.
El ex gobernador de la región de Lambayeque, Perú (2002-2008), ganó reconocimiento por desarrollar una gestión basada en la transparencia de la administración pública y no duda en afirmar que la corrupción tiene su caldo de cultivo en el modelo estatista. "Lo más perjudicial para la democracia es el estatismo porque quienes manejan el Estado se vuelven los nuevos monarcas".
Admite que su país está plagado de corrupción, pero su paso por el Parlamento le permite señalar que ese flagelo "no tiene que ver con ser de izquierda o de derecha, sino con la concepción del poder".
Libertad y autonomía. Yehude Simon también fue un perseguido político del fujimorismo y en 1992 fue condenado a prisión, donde permaneció ocho años y salió luego de recibir un indulto presidencial en 2000.
Desde esa experiencia invita al presidente Hugo Chávez a reflexionar, pues cree en la necesidad de "respetar al adversario, por muy duro que sea; de lo contrario, se implanta la dictadura. Si hay persecución, eliminación de instituciones y acoso a los partidos, el Presidente no va a trascender a la historia".
No quedó por fuera de las palabras de Simon el asunto de la libertad de expresión. El dirigente político, que ha pasado por todos los niveles de gobierno en su país, cree que cuando la prensa juega en función de los intereses de los dueños hay que combatirla con ideas, pero no cerrarla: "El país que pierde su libertad de expresión y de prensa cae en manos de la noche más oscura".
Ve con preocupación que funcionarios del Estado venezolano, como los magistrados y el contralor general, expresen en público y sin rodeo su simpatía con el Presidente de la república.
Considera que cuando los poderes se pliegan a un individuo "el gobierno deja de responder al pueblo para responderle a una minoría que administra todo en función de los antojos de una persona". Alerta que si el Ejecutivo absorbe al Poder Judicial se desata la corrupción, la democracia entra en riesgo y la sombra de la dictadura se cierne sobre el país.
fuente: http://www.el-nacional.com/www/site/p_contenido.php?q=nodo/142872/Internacional/Simon:-Gobierno-que-no-respeta-al-adversario-termina-en-dictadura
25 de junio 2010 | 09:14 am - Maru Morales
No hay comentarios.:
Publicar un comentario