Por Raúl Mendoza La Repùblica
Su pensamiento, innovador y solidario, quedó plasmado en un libro publicado en 1971, pero que él ya maduraba desde mucho antes: "Teología de la Liberación. Perspectivas", en el que planteaba que el mensaje cristiano en América Latina, pobre y desigual, debía alcanzar no solo la liberación del espíritu del ser humano, sino también la mejora de sus condiciones sociales y materiales. Hoy sus ideas siguen tan actuales como siempre. La pobreza, la injusticia, la violencia, siempre deben ser combatidas. El mes pasado Gustavo Gutiérrez, iniciador –junto a otros teólogos latinoamericanos– de esta corriente de pensamiento dentro de la Iglesia, cumplió 80 años y 50 de sacerdocio. La ocasión fue propicia para reunirse en su nombre y para presentar un libro en su homenaje: "Libertad y esperanza. A Gustavo Gutiérrez por sus 80 años". En el texto, los amigos y compañeros de ruta escriben sobre temas vinculados a su enfoque cristiano: los pobres, la fe, la dignidad, los derechos humanos, la construcción de una sociedad solidaria. "(Gustavo) no es hombre de una fe accidental y transitoria, sino de una fe honda, madurada en las páginas de San Pablo, nutrida de las viejas voces con que Bartolomé de las Casas –su mentor ideológico– clamó, siglos atrás, desde el desierto americano, para que los reyes y los poderosos advirtieran cómo crecían en aquellos pueblos, la desazón y el dolor, y cuán difícil era evangelizar", comentó Luis Jaime Cisneros, lingüista y amigo del teólogo, la noche de la presentación. En la misma reunión el sacerdote Brian Pierce, llegado desde Roma, habló también de las ideas renovadoras que laten en la obra de Gutiérrez: "Los escritos tuyos y de otros teólogos nos ayudaban a ver la realidad de nuestros tiempos con nuevos ojos. Eran tiempos de mucha vitalidad y compromiso. El evangelio se nos hizo vida gracias a ustedes (…). Nos ayudaron a descubrir que la Biblia era más que mandamientos y milagros. Era un libro que transmitía esperanza y libertad". TEOLOGÍA Y COMPROMISO
"Me pidieron hablar de Teología del Desarrollo y me negué. Les dije que hablaría de Teología de la Liberación, que era más pertinente a nuestro contexto (...). En realidad no pensé escribir un libro propiamente. Uno trabaja en los temas que le interesan y que poco a poco van saliendo. Al comienzo de 1969 una comisión ecuménica sobre temas de desarrollo me invitó a Ginebra. Entonces retrabajé la ponencia de Chimbote y así lo seguí ampliando", contó sobre su libro capital. Respecto a su aporte al pensamiento católico, el brasileño Leonardo Boff, otro de los padres de la Teología de la Liberación dice: "Pocos son los creadores de una ruptura epistemológica. En el campo de la filosofía occidental moderna fueron creadores Descartes, Kant, Hegel, Marx, Heidegger. En teología destacaron Tomás de Aquino, Lutero, Bultmann, Rahner. Gustavo Gutiérrez abrió un camino nuevo para el pensamiento teológico, descubrió una nueva manera de hacer teología". AMIGOS DEL MUNDO
"El padre siempre manifestó su sensibilidad por las familias más pobres, especialmente por los niños. Cuando en 1988 el país estuvo sacudido por la crisis económica, el padre Gustavo fue el principal gestor para la organización de los comités del Vaso de Leche, los comedores, el botiquín y los desayunos para niños. Estas labores no solo las apoyaba con los escasos recursos de la Iglesia, sino que se daba tiempo, a pesar de estar ocupado, para visitar los lugares donde se desarrollaban", cuentan. Otros amigos de la Iglesia también reconocen la influencia de Gutiérrez en sus propias visiones de la fe. El arzobispo de Tegucigalpa, Óscar Andrés Cardenal Rodríguez Madariaga, dice de él: "Tuve la dicha de conocerlo hace 20 años, cuando fui elegido secretario general del Celam (...). Fue entonces que lo visité en Lima y en un coloquio fraterno nació una amistad que me ha enriquecido en mi servicio a América Latina". Y además de sus cualidades de pensador y amigo, a Gustavo Gutiérrez también se le reconoce su perfil como educador y humanista. La noche en que el libro en su homenaje fue presentado, Gustavo dijo agradecido que la "teología, la reflexión, el lenguaje sobre Dios –que literal y etimológicamente es la teología– no tiene sentido si ese lenguaje sobre Dios no es comunicado a otros". Él ha dedicado su vida a hacerlo. Y sigue trabajando en ello. OBRA EXTENSA
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lunes, julio 07, 2008
Gustavo Gutierrez; La voz de los pobres
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1 comentario:
Estimado compañero:
Te cuento que soy un trovador argentino, comprometido con las luchas de nuestra America morena.
El motivo de mi visita, es el invitarte a visitar mi blog, ya que desde hace unos dias, he recibido a un huesped nada "querible", se trata de un gusano facista de Miami. La cuestion es que estoy invitando a la gente a participar del debate que se establecio con este esbirro del imperialismo.
Ojala puedas visitarme e invitar a otros a hacerlo.
Desde Argentina, te mando un gran abrazo revolucionario.
Alejandro Jusim (trovador)
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